El sorprendente descubrimiento que aprendí con tecnología de meditación durante 7 días

El sorprendente descubrimiento que aprendí con tecnología de meditación durante 7 días

Meditacion
Summary:

He meditando desde que tenía 14 años de edad.

Es uno de mis rituales diarios más preciados. Y por buena razón.

Desde el 2015, más de 1400 estudios acreditaron la meditación y el mindfulness, con una mayor longevidad, mayor productividad, felicidad e incluso bondad. Y así, durante los últimos 10 años, a través de Mindvalley, he construído empresas alrededor del mindfulness y la meditación.

Pero nada de lo que había vivido hasta entonces como practicante experimentado, se acerca a lo que me pasó en un “retiro” de meditación especial del que acabo de regresar.

No estoy afiliado a la empresa que organiza estos retiros. Y no es un producto que pertenezca a Mindvalley. Pero es algo que siento que necesito compartir, porque me cambió.

Para siempre.

El movimiento del “yo cuantificado” combinado con la máquina de medición de ondas cerebrales

En Silicon Valley, el movimiento del “yo cuantificado” está creciendo en popularidad.

Personas conocidas como “biohackers” están midiendo todos los aspectos del ser humano. Si alguna vez has usado una aplicación de sueño en tu móvil para medir la calidad del mismo, o si has utilizado tecnología portátil para registrar la cantidad de pasos que das en un día, eres parte del movimiento del Yo cuantificado.

En pocas palabras, estás utilizando mediciones y métricas para mejorar tu bienestar.

El “yo cuantificado” está llegando a la meditación de una manera GRANDE, a través de máquinas de medición de ondas cerebrales… tradicionales, pero con un toque fascinante.

Recientemente pude experimentar esto a través de una invitación de mi amigo, Dave Asprey.

Dave, como sabes, es el formidable empresario detrás de la marca del Café Bulletproof (café quemagrasa), que está resonando en las noticias. Él está actualmente en la revista Forbes y Fortune porque su cadena de café se está extendiendo a través de EE UU.

Dave es una de las personas más en forma, enfocadas e inteligentes que he conocido. Sin embargo, hace menos de 10 años, era completamente diferente. Me dijo que pesaba más de 130 kilos y su vida era un completo desastre. Dave dijo que todo cambió cuando experimentó este nueva forma de meditación.

Volé hasta Victoria, en Columbia Británica, para ver a Dave y probar este programa. Se llama 40 años de Zen.

¿Por qué ese nombre extraño? Los científicos que desarrollaron esta tecnología estudiaron la ondas cerebrales de muchas personas extraordinarias. Multimillonarios, persona intuitivas, creativos, monjes y místicos.

Lo que encontraron fue que cuando meditas usando estos métodos, el cerebro adquiere los mismos patrones de ondas cerebrales que alguien que ha pasado entre 21 a 40 AÑOS practicando meditación Zen.

40 años de entrenamiento Zen en 7 días

Y así empecé mi viaje en este programa con Dave Asprey y algunas de las personas más notables que he conocido. Nuestro grupo de 7 personas consistía en un famoso actor de Hollywood, un tipo que acababa de vender su compañía de mil millones de dólares, una eminencia de la medicina, y mis amigos, los autores JJ Virgin y Joe Polish. Y, por supuesto, Dave.

Meditación

Medición de ondas cerebrales con tecnología de vanguardia en meditación

El hecho es que 40 años de Zen no es nada barato, $15.000 dólares por 7 días. Y he aquí por qué…

De la misma forma en que usamos aplicaciones de sueño para medir la calidad del mismo, nos conectaron a las mejores tecnologías de vanguardia en meditación: equipos de bioretroalimentación especializada para medir nuestras ondas cerebrales. Este equipo fue desarrollado por varios pioneros de la materia, que habían estudiado las ondas cerebrales de decenas de miles de personas con estos dispositivos.

Después de haber recogido una gran cantidad de información, descubrieron que existen diferentes patrones de ondas cerebrales correspondientes a diferentes tipos de personas. Estudiaron a personas altamente creativas, los monjes Zen, multimillonarios. Todos ellos mostraron patrones de ondas cerebrales muy diferentes.

Pero lo realmente emocionante, fue que encontraron la manera de entrenar a otras personas para replicar estos patrones.

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Nada de lo que he estudiado en la meditación se compara a esto

Entonces, ¿cuál fue la gran diferencia entre lo que experimenté y otros programas de meditación “tradicionales”?

Para empezar, en la meditación tradicional, por lo general sigues alguna forma de práctica cultural. Gran parte de las ideas se basan en la “experiencia personal”. Pero el problema es que, es difícil medir el impacto de “experiencias personales”. Lo que es cierto para una persona, puede ser falso para otra. La consciencia es todavía un misterio científico.

Verás, incluso mis propios estilos de meditación como “El método de Envisionar” se basan en estudios sobre la gratitud, la felicidad y así sucesivamente. Pero el problema es que cada cerebro es diferente. Cierta visualización puede crear en mí un profundo sentimiento de euforia, pero puede no tener el mismo efecto para ti. Una técnica de perdón que funciona para ti, puede no funcionarle en absoluto a otra persona.

No hay una “talla única” para la meditación.

Pero cuando estás meditando en una cabina y tu cerebro está conectado a una máquina que está registrando con detalle tus ondas cerebrales, es fácil descubrir exactamente qué funciona y qué no.

Y entonces es fácil ver la diferencia entre los 40 años de Zen y la meditación clásica, como el Mindfulness o Vipassana.

Se basa en bioretroalimentación real.

Se pueden VER los resultados de lo que está pasando en tu mente.

De inmediato.

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El equipo al que nos conectaron emitía sonidos distintos en función de las ondas cerebrales que llegaramos a producir. Y durante las sesiones, nos dijeron que aumentáramos nuestra producción de ondas alfa. A medida que nos centrábamos en crearlas, los sonidos de la cabina iban cambiando. También veíamos números en nuestras pantallas, que indicaban la amplitud de nuestras ondas cerebrales (a mayor amplitud, mejor) y la coherencia entre ambos hemisferios cerebrales.

Jamás había evolucionado tan rápido mi práctica de meditación en tan poco tiempo

Mientras navegaba por diferentes estados de conciencia y probaba casi cada técnica de visualización, relajación o meditación que conocía, iba escuchando y viendo los resultados al instante. Esto me permitió ajustar y mejorar rápidamente todo lo que pensaba que sabía acerca de la meditación.

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Produciendo ondas alfa, theta, y delta

Las ondas alfa se asocian con la creatividad, la compasión, la comprensión, el perdón y el amor. Y al final de esa sesión, me sentía totalmente diferente.

Y dado que estaba recibiendo retroalimentación constante e inmediata, fui capaz de modificar, analizar y redirigir mi atención a las cosas que funcionaban mucho más rápido de lo habitual. Como resultado, todos avanzamos muchísimo y conseguimos controlar la producción de ondas alfa.

Cuando Dave probó esto por primera vez, hace años, la amplitud de sus ondas alfa marcaba aproximadamente 500 µv (microvoltios). Durante nuestras sesiones, Dave estaba registrando amplitudes de 3.000 µv. Eso sí, esta era su octava participación en el programa de “40 años de Zen”.

Yo, por el contrario, empecé en 500 µv, y al final de los 7 días, estaba llegando a amplitudes de hasta 900 µv con total facilidad.

Pero no solo importan las ondas alfa. Otros tipos de ondas se correlacionan con diferentes experiencias.

Las ondas theta por ejemplo, se correlacionan con destellos de creatividad e intuición.

Y las ondas delta están asociadas con “alterar la realidad.”

Curiosamente, a pesar de que mis ondas alfa no eran tan altas como las de otras mentes más creativas del grupo, obtuve un marcaje superior en las ondas delta. Y según nuestros entrenadores del programa, esto solo se da en menos del 1% de la población.

Tras pasar un tiempo en la cabina, nos reuníamos con los entrenadores en el instituto, revisábamos nuestros escáneres cerebrales para ayudarnos a entender qué sucedía exactamente en nuestra mente.

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Todo el evento fue para enseñarnos cómo aumentar nuestras ondas alfa. (Hay otras formaciones avanzadas para aumentar las Theta y Delta). En este sentido, los resultados hablan por sí mismos.

El secreto para disparar la amplitud de ondas cerebrales alfa: el perdón

Pero lo más sorprendente fue el método que estábamos aprendiendo para aumentar nuestras ondas alfa.

Fue solo una cosa. Y pasamos 7 días completos centrados en ella.

El perdón.

Tuvimos que perdonar a todas las personas que nos habían hecho daño en la vida. Aunque fuera lo más pequeño del mundo.

Tuve que perdonar a maestros de la escuela secundaria. A compañeros de negocio. A miembros de mi familia. Todo el mundo que yo sentía me había herido, gravemente o no. Y cada vez que hacía una ronda de perdón, mis ondas alfa se disparaban. Los creadores del programa descubrieron que el factor más significativo en la supresión de ondas alfa es aferrarse a rencores e ira. Por lo que se hacía esencial ser capaces de librarnos hasta del último trazo de ira. El método que nos enseñaron era increíblemente eficaz.

Para mí fue muy oportuno. Tenía pendiente perdonar a alguien por algo muy grave.

Cómo perdonar al hombre que me había robado

A veces, la vida te pone en situaciones extrañas, casi irónicas.

3 meses antes de este entrenamiento, pasé por una de las experiencias más horribles de mi vida.

Por entonces yo empleaba a unas 150 personas en una de nuestras oficinas. Y acababa de descubrir que alguien a quien había confiado la ejecución de las operaciones y la gestión de nuestras oficinas, estaba desviando fondos. Había creado proveedores falsos – reparadores de aire acondicionado, servicios de limpieza y de portería, y luego pagaba a sus propias empresas sumas exorbitantes para hacer el mantenimiento de nuestra oficina. Es decir, que la persona que contraté para gestionar las viviendas de nuestros empleados y el mantenimiento de la oficina, pagaba a sus propias empresas para proporcionarnos dichos servicios. Esto es ilegal y altamente corrupto.

Para cuando descubrimos el complot, se había embolsado más de $ 100.000.

Fue un duro golpe para mí. No podía creer que alguien en quien había confiado tan profundamente pudiera aprovecharse de mí de este modo.

Pero por desgracia, lo peor estaba por venir. Cuando finalmente lo despedimos y lo denunciamos a las autoridades, se lanzó con increíble empeño en hacerme la vida difícil. Desde amenazas de palizas a manos de gángsters, a la interrupción de nuestras actividades empresariales enviando a los bomberos con falsas denuncias de que nuestra oficina presentaba peligro de incendios, hizo todo lo que pudo durante meses para hacerme la vida imposible.

Fueron momentos estresantes para mí y para mi familia. Y fue probablemente una de las situaciones más estresantes que he tenido que soportar.

Cuando estábamos haciendo los ejercicios de perdón en 40 años de Zen, decidí dejarlo para el final.

Allí estaba yo meditando, en esta cámara oscura. Tratando de perdonar a un hombre que había robado de mi empresa. Que traicionó mi confianza. Que amenazó con hacerme daño. Al terminar el ejercicio, la máquina emitió un pitido repentino.

Acababa de registrar mi máxima amplitud de ondas cerebrales.

Siempre supe que el perdón era muy poderoso. Pero nunca imaginé que lo fuera en esta medida. Perdonar a este hombre me liberó.

Y me sorprendió mucho poder perdonarlo tan a fondo. Pero más que eso, sentí una profunda compasión por él.

A pesar de que las acciones de ese psicópata me habían perseguido en los meses anteriores, creo que si lo viera hoy, podría sentarme tranquilamente con él, tomar un café y dedicar tiempo para entenderlo y no ponerme nervioso o perder los estribos.

Este es el significado de la frase, “Perdonar hasta amar.”

Así que, si estás buscando llegar al siguiente nivel de meditación, el perdón es la clave.

perdón

Cómo perdonarte y liberarte de verdad

Aquí tienes una versión simplificada del Ejercicio del perdón que aprendí.

Paso 1: Establece la escena

En primer lugar, con los ojos cerrados y durante dos minutos o así, trae de vuelta toda la ira, la frustración y el dolor que sentiste cuando alguien en tu vida te hizo daño. Vuelve a revivir el momento preciso en que sucedió, y recrea la imagen mental del entorno en que estabas cuando interactuaste con ellos. (Por ejemplo, en una de mis sesiones me imaginé al director de escuela que me maltrataba, en la misma cancha de baloncesto donde me castigó a permanecer de pie bajo el sol abrasador durante horas.)

Paso 2: Siente la rabia y el dolor

Cuando veas a la persona que te hirió delante de ti, deja salir todas tus emociones. Revive la ira y el dolor. Siéntelo. Pero hazlo solo unos instantes. Una vez afloren todas esas emociones que esta persona provocó en ti, ve a la siguiente fase…

Paso 3: Perdónalo hasta amarlo

Sigue visualizando a esa persona frente a ti, pero ahora, siente compasión por ellos. Pregúntate: ¿qué puedo aprender de esto? ¿En qué medida ha mejorado mi vida tras esta situación?

Mientras hacía el ejercicio, recordé una cita de uno de mis autores favoritos, Neale Donald Walsch: “[Dios]: Yo no te envío sino ángeles.” Cada persona que se cruza en nuestras vidas, incluso aquellos que nos han herido, están ahí para enseñarnos una lección importante.

Así que, piensa en qué lecciones te está brindando esta situación tan dolorosa: ¿En qué medida te hacen mejor persona? ¿Cómo te ayudan a crecer?

A continuación, piensa en quién es esta persona. Qué dolor o angustia podrían haber pasado en su vida, que les llevó a hacer lo que hicieron.

Las personas que sufren, causan dolor

Uno de mis amigos tiene una cita que me gusta:

“Las personas que sufren, causan dolor”

Esto significa que los que causan daño a otros, lo hacen porque ellos también acarrean dolor interno. Así que piensa en lo que pueden haber sufrido en la infancia, o más recientemente.

Traté de visualizar al hombre que me estafó, siendo un niño pequeño. Tal vez su familia era pobre. Tal vez tuvo un padre maltratador. Quizá su vida era una lucha constante y su único medio de supervivencia de niño era robar.

Y aquí hay que hacer una distinción importante: “perdonar hasta amar” a alguien no significa olvidarlo todo (en mi caso, retirar los cargos contra él). Por supuesto que sigue siendo necesario protegerse y tomar medidas, si procede. Los actos criminales, sobre todo, deben ser reportados a las autoridades.

Pero lo que sí significa es que el dolor de lo sucedido ya no te coma por dentro.

Otra cosa importante que aprendí de esta experiencia, es que no es necesario pedirle perdón a la otra persona. Solo tienes que perdonarlo tú. Y hacerlo está completamente bajo tu control.

El perdón te hace Inj*dible

Dave Asprey dice que cuando empiezas a perdonar te vuelves Inj*dible.

Después del retiro, me envió este mensaje de texto:

Meditación

Dave me envió este SMS después de la formación. Me he sentido “Injodible” desde entonces.

Cuando aprendes a perdonar de verdad, te vuelves Inj*dible.

Puede que haya gente malintencionada, y en ese caso deberás defenderte, y tomar medidas si es necesario. Sin embargo, podrás seguir con tu vida sin tener que gastar energía en ellos.

Bien, 40 años de Zen promete muchas cosas: un aumento de 11,7 puntos en el coeficiente intelectual, mayor creatividad, mejor capacidad de entrar en estados alfa, theta y delta.

Todo eso es muy impresionante. Pero incluso si no fuera así, mi mayor beneficio fue “libertad”.

Lo que hizo de este retiro la experiencia más poderosa de crecimiento personal que he tenido jamás, fue la sensación de liberación que sentí al terminar.

Me había liberado de tantos rencores que había mantenido durante años. Había soltado recuerdos dolorosos que incluso había olvidado que tenía. Y finalmente, me permitió perdonar las ofensas de las personas que me hicieron daño en la vida.

Jamás me he sentido más en paz conmigo mismo.

Por ello, te recomiendo encarecidamente este poderoso programa de meditación.

El “Yo Cuantificado” es un movimiento increíble que transformó profundamente mi mentalidad acerca de la meditación. Si me pidieras que te recomendase ahora mismo una práctica de meditación, diría que busques un método que mida tus experiencias mientras meditas. Por eso estoy trabajando con Dave Asprey, y me propongo conseguir que este tipo de tecnología sea más accesible para el público en general.

¿Has probado la práctica del perdón descrita anteriormente? ¿Tienes alguna experiencia de “perdonar hasta amar” a alguien?

Comparte tus experiencias acerca del perdón en la sección de comentarios a continuación.


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escrito por
Vishen Lakhiani